Antídotos específicos: qué son y cuándo utilizarlos

Si alguna vez te has preguntado qué hacer cuando alguien sufre una sobredosis, la respuesta rápida suele ser un antídoto. Un antídoto específico es un fármaco que neutraliza o contrarresta los efectos tóxicos de otro medicamento o sustancia. No son "cura milagrosa", sino herramientas que actúan en el momento crítico para salvar vidas.

Tipos de antídotos según la toxicidad

Existen varios grupos según la sustancia a la que se enfrenten:

Naloxona: se usa cuando hay una sobredosis de opiáceos como la heroína o la oxicodona. Actúa bloqueando los receptores opioides y revierte rápidamente la depresión respiratoria.

Flumazenil: indicado para revertir la intoxicación por benzodiacepinas (diazepam, alprazolam). Restaura la actividad del sistema nervioso central, pero su uso debe ser cuidadoso en pacientes con epilepsia.

N‑acetilcisteína: el antídoto de referencia para la sobredosis de paracetamol. Reconstituye el glutatión hepático y limita el daño al hígado si se administra a tiempo.

Dimercaprol y EDTA: se utilizan contra intoxicaciones por metales pesados como arsénico, plomo o mercurio. Forman complejos que el cuerpo puede eliminar con más facilidad.

Vitamina K: esencial cuando alguien ha tomado una sobredosis de anticoagulantes tipo warfarina. Restaura la coagulación y previene hemorragias graves.

Atropina y Pralidoxima: antídotos para intoxicaciones por organofosforados (pesticidas). La atropina controla la broncoconstricción y la secreción, mientras que la pralidoxima reactiva la acetilcolinesterasa.

Cómo actuar en una sobredosis: pasos rápidos

1. Llama al número de emergencias (112 en España) sin dudar. Cada minuto cuenta.

2. Identifica la sustancia si es posible: envase, pastilla o cualquier pista. Esa información ayuda al personal sanitario a elegir el antídoto correcto.

3. No induzcas el vómito a menos que lo indique un profesional. En algunos casos, vomitar puede empeorar la lesión.

4. Coloca a la persona en posición lateral de seguridad si está inconsciente pero respira. Mantén la vía aérea abierta.

5. Proporciona los datos de la dosis y el momento en que se tomó. Cuanto más precisa sea la información, más eficaz será el tratamiento.

En los centros de urgencias, una vez que llega la información, el equipo médico evalúa la necesidad de un antídoto específico y lo administra según protocolos actualizados. La rapidez en la identificación y la comunicación es tan importante como el antídoto mismo.

En Salud y Medicamentos España encontrarás fichas detalladas de cada antídoto, sus dosis, contraindicaciones y efectos secundarios. Usa nuestra guía para estar preparado y actuar con confianza cuando la situación lo requiera.